El vinilo de corte es uno de los materiales más utilizados en rotulación profesional. Se fabrica a partir de una lámina de color sólido que se corta con precisión mediante un plotter, siguiendo la forma del diseño.
No se imprime, por lo que su color proviene directamente del material, ofreciendo una durabilidad excepcional frente al sol, el viento y el salitre.
En Canarias, donde las condiciones climáticas pueden ser extremas, el vinilo de corte es perfecto para rótulos exteriores, escaparates o vehículos. Sus colores permanecen estables con el tiempo y requieren muy poco mantenimiento. Además, su acabado limpio y su resistencia lo convierten en la opción más recomendada para proyectos permanentes y con alto nivel de exposición solar.
El vinilo impreso permite reproducir cualquier diseño a todo color sobre una superficie blanca o transparente mediante tinta UV, látex o ecosolvente. A diferencia del vinilo de corte, ofrece libertad total en imágenes, degradados y composiciones fotográficas, lo que lo hace ideal para campañas visuales y decoración de interiores.
En Canarias, este tipo de vinilo es perfecto para murales decorativos, cristaleras de tiendas y flotas de vehículos, especialmente cuando el objetivo es atraer la atención con imágenes llamativas o mensajes temporales.
Eso sí, para exteriores es fundamental aplicar un laminado protector UV, ya que el sol y el salitre pueden acortar su vida útil si no se protegen adecuadamente.
Elegir entre un tipo u otro depende del diseño, la ubicación y la durabilidad que se busque.
Durabilidad: el vinilo de corte puede durar más de cinco años; el impreso necesita laminado para alcanzar esa resistencia.
Diseño: el de corte es perfecto para logotipos simples; el impreso, para imágenes complejas y campañas temporales.
Clima: en exteriores con alta exposición solar, el de corte es la opción más fiable.
Precio: aunque el impreso suele ser más económico, requiere mantenimiento y sustitución más frecuente.
En resumen, el vinilo de corte es ideal para proyectos permanentes, mientras que el vinilo impreso brilla en diseños creativos y decorativos. En muchos casos, ambos pueden combinarse para lograr resultados profesionales y visualmente equilibrados.
En Vinilos Gran Canaria trabajamos con ambos tipos de vinilo y sabemos que cada proyecto tiene su propia lógica.
Algunos requieren la resistencia del vinilo de corte; otros, la expresividad y versatilidad del vinilo impreso. Lo esencial es entender el espacio, la exposición al clima y la intención del diseño.
Cada instalación que realizamos parte de una idea simple: el vinilo no es solo un material, es una forma de comunicación visual que debe durar y emocionar.
Si estás pensando en renovar la imagen de tu negocio o necesitas orientación sobre qué vinilo utilizar, puedes contactarnos aquí.
Te ayudaremos a que tu marca se vea y se mantenga impecable, incluso bajo el sol de Canarias.
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